Ejerciendo la
psicología como psicólogo
general sanitario y Neuropsicólogo
desde 2008, desde ese mismo año es el
Asesor Técnico de AHIDA
(Asociación de TDAH de Bizkaia) y ha
ejercido varias funciones profesionales para
EUSARGHI (Federación Vasca de
Asociaciones de TDAH) entre ellas la de
impartir varias conferencias en torno al TDAH.
Es doctor en Psicología Clínica
y de la Salud por la Universidad de Deusto
desde el año 2015, además de
director del “Proyecto de Investigación
y Seguimiento en TDAH y Trastornos Afines”
(PISTTA) y profesor asociado del Departamento
de Procesos Básicos y su Desarrollo de
la Universidad del País Vasco. En todos
estos años, además de ser el
gerente del Gabinete de Psicología,
Neuropsicología y Psicopedagogía
Amorebieta que dirige desde 2009, imparte
desde 2011 las sesiones de terapia grupales de
niños y chavales con TDAH, así
como las dirigidas a los padres de
niños con este trastorno, y
también otras para sus allegados o
convivientes (hermanos, primos, etc.). Es,
además, coautor de algunas herramientas
conocidas (WMS-IV, NEPSY-2, WPSSI-IV), autor
de una treintena de publicaciones
científicas y comunicaciones y tutor de
prácticas de alumnos universitarios,
entre otros méritos.
RESUMEN SIMPOSIO
INVITADO
Prevención y
diagnóstico del TDAH a lo largo del
ciclo vital
El presente
simposio pretende hacer un recorrido vital por
la vida de la persona con TDAH, desde el
momento del nacimiento, donde los apegos y
vinculaciones que establezca el niño,
así como las primeras expectativas y
vínculos desarrollados desde los
progenitores jugarán un papel
determinante en la configuración
psíquica y en el posterior manejo de
las emociones del pequeño.
Posteriormente, en la segunda infancia y
adolescencia, existe un vacío
clínico de herramientas que puedan
darnos información desde una
perspectiva más ecológica, de
manera que las herramientas actuales se basan
más en el método del papel y
lápiz, que supone condicionar al
niño/joven a que rinda de manera
antinatural y con una ejecución
más adaptativa de lo que lo hace en
rutina. En ello, las nuevas
tecnologías, pero también tener
en cuenta cómo vive la
problemática el propio paciente,
resultan cruciales.
Finalmente, la edad adulta, donde se ha
comenzado a trabajar hace no mucho, pese a la
sospecha que existía en torno a la
posible existencia de este trastorno
también en esta etapa. Así, son
muchos los niños con TDAH que
continúan sufriendo el trastorno de
adulto, por lo que es importante saber
detectarlo, diagnosticarlo y, sobre todo,
conocer sus características, a lo que
dedicaremos otra comunicación.
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